"Drácula" de Bram Stoker e "Carmilla" de Sheridan Le Fanu
Galego:
Ducias
de filmes, series de televisión, videoxogos, cómics… O escritor
irlandés Bram Stoker non imaxinaba a repercusión que a súa novela
de terror gótico ía ter na cultura popular contemporánea. Non é
nin moito menos a primeira historia con temática vampírica, pero o
seu antagonista deseñou a imaxe do strigoi moderno coma o
sedutor e elegante espectro que se coa pola fiestra do teu dormitorio
de madrugada para calmar a larica nocturna.
O
monstro chuchasangue existe dende a antigüidade en numerosas
culturas ao redor do globo, sempre relacionado co mundo demoniaco.
Coa novela de Stoker estes portadores do mal espallaban a morte,
transmitindo o mal coma se dunha enfermidade se tratase, contaxiando a
súa vítima coa maldición vampírica desposuíndoos de vida e de
alma, condenados a errar eternamente. A crenza nestes seres está
presente en practicamente a totalidade do continente europeo, pero
atópase especialmente asentada na área xeográfica e cultural dos
Balcáns e Europa Central. Ata aló viaxa un dos protagonistas desta
novela, o bo de Jonathan Harker, contratado polo enigmático Conde
Drácula para arranxar a compra dunhas propiedades en Inglaterra. Nun
escenario arrepiante e inusual, Harker experimenta unha serie de
sucesos que o conduce ao bordo da tolemia, namentres a súa prometida
Mina tenta axudar a súa mellor amiga, Lucy Westenra, en plena crise
de sonambulismo.
¿Que
resaltar deste arquicoñecida novela para que vos atrevades con ela?
Primeiramente, que é a obra ideal para ler nunha chuviosa tarde de
outono ás portas do Samaín e das Magostadas, segundo, que se trata
dunha historia na que os persoeiros femininos comezan a ter certo
protagonismo sen estar necesariamente supeditadas a un protagonista
masculino. Non, Bram Stoker non era nin moito menos un escritor
feminista, pero ao seu favor cómpre dicir que Lucy e Mina
convértense ao longo da novela en pezas clave da historia, xirando a
trama en torno a ellas, deixando incluso a figura do Conde nun
segundo plano. Aviso para navegantes despistados coma min, a novela
está estruturada en forma epistolar, que tan ben pode resultarvos
innovadora como pesada (eu entro no primero paquete!)
Se
queredes o mesmo, pero mellor e en pequeno formato optai por
Carmilla, de Sheridan Le Fanu, outro escritor gótico da illa
esmeralda, que tamén cruza o continente para situar a sua novela na
rexión austríaca de Estiria. Aló as nosas protagonistas femininas
viven unha apaixoada e tormentosa relación cun alto contido erótico
nun ambiente tétrico e supersticioso. Anterior a obra de Stoker, Le
Fanu conserva o aspecto fantasmagórico e errante dos strigoii
tradicionais, renunciando á vitalidade e astucia de Drácula, o que
pode levarte a empatizar coa antagonista.
Recomendadísimo
combinar a lectura destas obras con información sobre a crenza real
nestes seres, aínda presente no corazón dos Cárpatos, e coas
numerosas adaptacións filmicas e televisivas destas lendas. As miñas
favoritas son sen lugar a dúbidas o Drácula de Bela Lugosi, do
1931,”Nosferatu, eine Symphonie des Grauen” do 1922, a icónica
Drácula de Coppola (aínda teño pesadelos con Sadie Frost e o seu
estilismo post-mortem) e a serie de televisión “The Strain” de
Guillermo del Toro.
Español:
Docenas de películas, series de televisión, videojuegos, cómics... El escritor irlandés Bram Stoker no imaginaba la repercusión que su novela de terror gótico iba a tener en la cultura popular contemporánea. No es ni mucho menos la primera historia con temática vampírica, pero su antagonista diseñó la imagen del strigoi moderno como el seductor y elegante espectro que se cuela por la ventana de tu dormitorio de madrugada para calmar el hambre nocturna.
El monstruo chucpasangre existe desde la antigüedad en numerosas culturas alrededor del globo, siempre relacionado con el mundo demoníaco. Con la novela de Stoker estos portadores del mal extendían el imperio de la muerte, transmitiendo el mal como si de una enfermedad se tratara, contagiando su víctima con la maldición vampírica despojándolos de vida y de alma, condenados a fallar siempre. La creencia en estos seres está presente en practicamente la totalidad del continente europeo, pero se encuentra especialmente asentada en el área geográfica y cultural de los Balcanes y Europa Central. Hasta allá viaja uno de los protagonistas de esta novela, el bueno de Jonathan Harker, contratado por el enigmático Conde Drácula para finalizar la compra de unas propiedades en Inglaterra. En un escenario espantoso e inusual, Harker experimenta una serie de sucesos que lo conduce al borde de la locura, mientras su novia Mina intenta ayudar su mejor amiga, Lucy Westenra, en plena crisis de sonambulismo.
¿Qué resaltar de esta archiconocida novela para que os atreváis con ella? Primero, que es la obra ideal para leer en una lluviosa tarde de otoño a las puertas del Samaín y de las Magostadas, segundo, que se trata de una historia en la que las figuras femeninas comienzan a tener cierto protagonismo sin estar necesariamente supeditadas a un protagonista masculino. No, Bram Stoker no era ni mucho menos un escritor feminista, pero a su favor debemos señalar que Lucy y Mina se convierten al largo de la novela en piezas clave de la historia, dejando incluso a la figura del Conde en un segundo plano. Aviso para navegantes despistados como yo, la novela está estructurada en epistolas, lo que puede resultaros innovador o tremendamente anodino (¡Yo entro en el primer paquete!)
Si gustáis de esta temática, pero buscais una novela de mayor calidad y en pequeño formato optad por Carmilla, de Sheridan Lee Fanu, otro escritor gótico de la isla esmeralda, que también cruza el continente para situar su novela en el centro de Europa, exactamente en la región austríaca de Estiria. Allá nuestras protagonistas femeninas viven una apsionada y tormentosa relación con un alto contenido erótico en un ambiente tétrico y supersticioso. Anterior a obra de Stoker, Le Fanu conserva el aspecto fantasmagórico y errante de los strigoii tradicionales, renunciando a la vitalidad y astucia de Drácula, consiguiendo que llegues a empatizar con la antagonista.
Recomendadísimo combinar la lectura de estas obras con información sobre la creencia real en estos seres, aún presente en el corazón de los Cárpatos, y con las numerosas adaptaciones filmicas y televisivas de estas leyendas. Mis favoritas son sin lugar a duda el Drácula de Bella Lugosi, del 1931, "Nosferatu, eine Symphonie des Grauen" del 1922, la icónica Drácula de Coppola (aun tengo pesadillas con Sadie Frost y su estilismo post-mortem) y la serie de televisión "The Strain" de Guillermo del Toro.
Español:
Docenas de películas, series de televisión, videojuegos, cómics... El escritor irlandés Bram Stoker no imaginaba la repercusión que su novela de terror gótico iba a tener en la cultura popular contemporánea. No es ni mucho menos la primera historia con temática vampírica, pero su antagonista diseñó la imagen del strigoi moderno como el seductor y elegante espectro que se cuela por la ventana de tu dormitorio de madrugada para calmar el hambre nocturna.
El monstruo chucpasangre existe desde la antigüedad en numerosas culturas alrededor del globo, siempre relacionado con el mundo demoníaco. Con la novela de Stoker estos portadores del mal extendían el imperio de la muerte, transmitiendo el mal como si de una enfermedad se tratara, contagiando su víctima con la maldición vampírica despojándolos de vida y de alma, condenados a fallar siempre. La creencia en estos seres está presente en practicamente la totalidad del continente europeo, pero se encuentra especialmente asentada en el área geográfica y cultural de los Balcanes y Europa Central. Hasta allá viaja uno de los protagonistas de esta novela, el bueno de Jonathan Harker, contratado por el enigmático Conde Drácula para finalizar la compra de unas propiedades en Inglaterra. En un escenario espantoso e inusual, Harker experimenta una serie de sucesos que lo conduce al borde de la locura, mientras su novia Mina intenta ayudar su mejor amiga, Lucy Westenra, en plena crisis de sonambulismo.
¿Qué resaltar de esta archiconocida novela para que os atreváis con ella? Primero, que es la obra ideal para leer en una lluviosa tarde de otoño a las puertas del Samaín y de las Magostadas, segundo, que se trata de una historia en la que las figuras femeninas comienzan a tener cierto protagonismo sin estar necesariamente supeditadas a un protagonista masculino. No, Bram Stoker no era ni mucho menos un escritor feminista, pero a su favor debemos señalar que Lucy y Mina se convierten al largo de la novela en piezas clave de la historia, dejando incluso a la figura del Conde en un segundo plano. Aviso para navegantes despistados como yo, la novela está estructurada en epistolas, lo que puede resultaros innovador o tremendamente anodino (¡Yo entro en el primer paquete!)
Si gustáis de esta temática, pero buscais una novela de mayor calidad y en pequeño formato optad por Carmilla, de Sheridan Lee Fanu, otro escritor gótico de la isla esmeralda, que también cruza el continente para situar su novela en el centro de Europa, exactamente en la región austríaca de Estiria. Allá nuestras protagonistas femeninas viven una apsionada y tormentosa relación con un alto contenido erótico en un ambiente tétrico y supersticioso. Anterior a obra de Stoker, Le Fanu conserva el aspecto fantasmagórico y errante de los strigoii tradicionales, renunciando a la vitalidad y astucia de Drácula, consiguiendo que llegues a empatizar con la antagonista.
Recomendadísimo combinar la lectura de estas obras con información sobre la creencia real en estos seres, aún presente en el corazón de los Cárpatos, y con las numerosas adaptaciones filmicas y televisivas de estas leyendas. Mis favoritas son sin lugar a duda el Drácula de Bella Lugosi, del 1931, "Nosferatu, eine Symphonie des Grauen" del 1922, la icónica Drácula de Coppola (aun tengo pesadillas con Sadie Frost y su estilismo post-mortem) y la serie de televisión "The Strain" de Guillermo del Toro.
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