"El Crimen de las estanqueras" de Alfonso Grosso. "Olvide a Judas y esté con Jesús..."

Alfonso Grosso Ramos (Sevilla, 1928 – Valencina de la Concepción, 1995) fue un escritor español cuya obra podemos incluir, según los estudiosos de la misma, en el realismo social (en su primera etapa) y en la influencia de la narrativa hispanoamericana en sus últimas novelas. Sin embargo, esta polarización de una obra tan compleja me parece, personalmente, demasiado elemental, encontrando trazas muy claras del movimiento realista en las últimas obras de Grosso. Tanto es así que yo he establecido claras similitudes entre “El crimen de las estanqueras” y “La familia de Pascual Duarte”, de Camilo José Cela o “Tiempo de silencio”, de Luis Martín-Santos, las cuales bien pudieron servir de inspiración a Grosso. Bien es cierto que también nos encontramos las mencionadas influencias hispanoamericanas de la obra de Gabriel García Márquez o Julio Cortázar, por citar dos ejemplos.
Si bien la influencia literaria de la época ha sido decisiva en la obra de Grosso, su propia personalidad ha dejado una huella profunda en sus novelas, en las cuales podemos percibir su naturaleza combativa y contestataria contra el régimen de Franco, que vivió tan de cerca. Este temperamento del que hablo le llevó a encontrarse con la justicia en no pocas ocasiones, además de arrastrarlo a la locura y la depresión en sus últimos años de vida.
Todos estos elementos que he mencionado y que caracterizan la producción literaria de Grosso los encontramos en “El crimen de las estanqueras” (1985), novela en la que el propio asesinato en torno al cual gira toda la trama se convierte en algo secundario que ayuda al autor a narrar con sublime maestría las miserias de la España de la postguerra. Miserias que transitan desde las rencillas familiares y vecinales que provocó la contienda, hasta las corruptelas políticas y policiales de los años 50, los intentos por esconder la inmundicia que empapa todos los aspectos de la vida, y una propia sociedad que no es capaz de escapar del atolladero.
Es una novela que nos habla de pobreza, de asesinato, de exilio, de injusticia, abusos, inmoralidad, de todo lo que no es grato y amable, y sin embargo consigue que empaticemos con casi todos los personajes, a pesar de su sordidez.
No dejéis de darle una oportunidad a esta gran obra de Alfonso Grosso y, sin embargo, poco conocida y valorada. Seguro que entrará a formar parte de vuestros imprescindibles para entender la triste España de la dictadura.

¡¡Un saludo y buena lectura queridiños!!

Puntuación: 8 de 10 ⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐

➡️Si te gustó: La familia de Pascual Duarte (1942, Camilo José Cela), Réquiem por un campesino español (1953, Ramón J. Sender), Crónica de una muerte anunciada (1981, Gabriel García Márquez).

➡️Recomendaciones cinéfilas: El crimen de las estanqueras de Sevilla (1991), Los Santos Inocentes (1984).

Comentarios

  1. ¡Hola!

    Gracias a tu reseña he descubierto un autor que leer y un título que descubrir en cuanto pueda.
    Enhorabuena por tus palabras y gracias por compartirlo con nosotros.

    ¡Un abrazo!

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    1. No sabes lo que nos alegra saber que nuestras reseñas sirven para ayudaros, nos anima a seguir con ilusión este proyecto. Moitas grazas! Un abrazo para ti también ❤️

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  2. ¡Hola, El enfermo literario!,
    A nosotras nos ha pasado como a Santiago. No conocíamos a este autor, así que nos lo apuntamos para descubrir su obra más adelante.
    Magnífico trabajo.
    ¡Nos leemos!

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